Mientras los espectadores aguardaban el inicio del delicado e íntimo espectáculo de Claire Ducreux, La sonrisa del náufrago, algunos miembros de la Asociación Entrelibros ocupaban la espera de niños, jóvenes y mayores leyéndoles álbumes ilustrados y poemas con la música y la danza como protagonistas, pues esas eran las artes que los habían convocado y las que daban sentido a las actividades del FEX, extensión del Festival Internacional de Música y Danza de Granada.
Cuanto antes, mejor, piensa Beke
Stefania lee a dos generaciones a la vez
Ojos y oídos atentos en torno a Adrián
Manuel atiende a las más tempranas espectadoras
Mireia se sienta (se siente) como en una tertulia de amigas